Mauro puso de cabeza el tercer empate en un partido tremendo en Floresta. Stracqualursi había hecho el 3-2 para Tigre, luego de que Teté González lo adelantara dos veces y Grazzini igualara con otros dos. Un punto para cada uno.
All Boys y Tigre, dos acostumbrados a jugar en canchas de menores dimensiones, regalaron un partido gigante en emociones. Los de Caruso (llegaron a 6 juegos sin derrotas) lograron ponerse en ventaja en tres ocasiones, pero los de Romero lograron igualarlo en la misma cantidad de veces. El punto les puede parecer poco a ambos, porque merecieron los tres puntos.
De área a área, así fue la primera etapa. De pelota parada, llegó la apertura del marcador, tras una desatención de la defensa local, Teté González solamente tuvo que poner la cabeza. Después llegó otro error en defensa, pero en la de los de Victoria y Grazzini definió con clase por arriba. Es cierto, los dos goles llegaron por errores, pero hay que darle el mérito al saber aprovecharlas.
En el segundo tiempo, se dio la misma película, Esteban González volvió a adelantar a Tigre, tras un córner, y el Mágico Grazzini, con un buen remate después de una linda jugada colectiva, el 2-2. Lejos de conformarse, ambos equipos quisieron más y el que pudo primero fue Traca, que con mucha fortuna volvió a poner arriba a Tigre. Con Fabbiani en cancha, los de Floresta fueron una vez más por la igualdad, y la lograron. El Ogro peinó un pelotazo, Torassa llegó al fondo y Matos cabeceó para el 3-3 final.
Dieron ganas de que no se terminara en noventa minutos, porque parecía que podían seguir haciendo goles, tanto por voluntad propia, como por errores rivales. Quizá, eso sea lo que tengan que corregir para llevarse tres puntos en las próximas fechas, poque después hicieron todo para ganar.