¡Floresta está de fiesta! All Boys volvió a ganar de local, esta vez a Banfield, y alcanzó la mitad del objetivo fijado para la temporada: llegó a 25 puntos.
All Boys tiene dos formas de ver el vaso.
Puede mirarlo medio lleno si contempla que en su vuelta a Primera sacó 25 puntos, sorprendió a todos y ya recorrió una fracción importante del camino hacia los 50 que el plantel se fijó como objetivo.
También puede observarlo medio vacío: sólo obtuvo tres puntos como visitante (todos empates), algo que si a futuro no corrige se verá obligado a ganar como local y podría perder la frescura que viene mostrando. Además, ya todos los rivales lo tendrán bien estudiado después de seis meses de rodaje en la A.
Pero el vaso está. Y en Floresta tienen suficientes razones como para hacer chinchín dentro de unos días. El equipo de José Romero se afianzó en Primera, sólo perdió un partido en su casa, le ganó en el mismo semestre a Boca y a River, además de vencer al líder Estudiantes. Y si bien todavía queda por delante un tramo importante del recorrido, más de un hincha está pipón.
Pepe otra vez jugó con su fórmula simple, la del esquema ochentoso con un enganche, Pérez García, que se encarga de distribuir juego hacia las bandas para asistir a Matos. Todo apoyado en un mediocampo cuyo corazón en Sánchez; y con la filosofía del toque que desnudó falencias en un Banfield que ya no es el que fue.
Sí, Lunati y sus asistentes influyeron en el resultado al no cobrar el offside de Matos en el 1-0, ni cobrar el penal de Domínguez a Ramírez. Pero no todo se le puede atribuir al referí. El equipo de Falcioni perdió equilibrio y solidez defensiva. Más allá del gol en contra de Segovia, Ladino también estuvo impreciso. La dupla Ramírez-Barrales, como ante Racing, no funcionó. JCF supo romper las estructuras y poner tres delanteros, acertando con el ingreso de Méndez, quien metió el descuento y el travesaño le negó el 2-2.
All Boys ahora brindará por repetir la campaña del último semestre. Banfield, casi afuera de la Libertadores 2011, para olvidarlo.
