Barrientos se quejó de la amarilla que Pompei le mostró a los dos minutos. Fernando Sánchez también cuestionó al pito: “Nos sentimos perjudicados”.
Hugo Barrientos fue, desde el inicio del Clausura, el foco de atención por su forma áspera de jugar. Ayer, fue amonestado apenas dos minutos después de haberse iniciado el partido, por una falta a Eduardo Ledesma, una infracción que no era para tarjeta aunque Pompei aprovechó para enmendar el error de no haberlo amonestado a los 15 segundos, por un planchazo a Valeri. “Jugué condicionado por la amarilla tan temprano. Me amonestó desde el vestuario y en una cancha tan chica quedás expuesto”, tiró Barrientos, molesto.
El volante central de All Boys quedó en la mira por la vehemencia con la que marcó a Giovanni Moreno en la primera fecha ante Racing, partido en el que el colombiano se rompió los ligamentos al cometerle una infracción al propio Barrientos; y la semana pasada estuvo a punto de trenzarse con su hermano Pablo, en el 3-0 de Estudiantes al Albo.
Fernando Sánchez tampoco se mostró muy conforme con la actuación de árbitro, sobre todo por la patada que Goltz le pegó al uruguayo Rodriguez: “Venimos sufriendo expulsiones por cosas más leves que esa y cuando nos pasa y no se sanciona, nos sentimos perjudicados”.